
Éste fue el animalito que encontré hace unos días enredado en mi jazmín. Podía haber sido de gorrión o hasta de paloma el polluelo que cayó de su nido directo a mi jardinera. Lo que no esperaba descubrir era a esta cría de cernícalo asustada y parapetada entre las ramichuelas. ¿Qué hice? Ahora te lo cuento.