
Me pillas algo melancólico, mirando a mi perro que pronto cumplirá diez años. Recuerdo cuando era un cachorro y tenía algún que otro problemilla, entre otras cosas, con su escaso apego por mis plantas. Hoy voy a explicarte cómo evité que siguiera haciendo agujeros en el jardín. Otro día, si quieres, te cuento más anécdotas.